Primero Justicia como proyecto generacional

Primero Justicia fue fundada por una generación que entiende que su desafío histórico frente a Venezuela es darle instituciones accesibles, justas, eficientes y respetuosas de los derechos humanos. Somos una generación que no titubea al señalar que su principal enemigo es la pobreza, y que la pobreza nace y crece en nuestra sociedad a través del ejercicio del poder alejado de la justicia, el cual se manifiesta en la ausencia de igualdad de oportunidades, en la impunidad, la corrupción, la cultura rentista y la arbitrariedad.

Somos un país con más de 130 años de militarismo. Estamos convencidos de que democracia y gobierno militar son incompatibles y que en Venezuela debe darse un gobierno civil, asentado en la justicia social y el progreso para todos a través de un Estado que proteja los derechos humanos.

Sólo podremos generar una cultura democrática en el mundo civil y militar mediante la construcción de instituciones transparentes, accesibles y eficientes; instituciones que generen confianza y estén al servicio de todos los ciudadanos.

Es tarea de todos el asegurar que el Estado atienda las necesidades de la población eficientemente, sin distingo de filiación política o familiar.

Nacemos como una alternativa a los partidos históricos que vaciaron sus ideales y perdieron el rumbo que marcó el inicio de la democracia, apartándose del sentir popular. Nuestras raíces espirituales y políticas están arraigadas en la motivación vital de que lograremos la Venezuela de la Justicia, una Venezuela con oportunidades para todos, donde el pueblo pueda hacer valer sus derechos a través del progreso, la justicia social y la equidad.