Cumaná, 13 de febrero de 2015.- No hace falta estar bajo un toque de queda oficial en nuestro país para mantenernos presos en nuestros hogares como consecuencia del temor al que vivimos sometidos los venezolanos, y en nuestro caso, todos los sucrenses.

El 2014 cerró con 24.980 fallecidos y una tasa de 82 muertes violentas por cada 100 mil habitantes, según señala el informe del Observatorio de violencia venezolana. Ocurrieron lamentables muertes de figuras públicas como fue el destacado caso de la actriz Mónica Spear, cuya muerte se convirtió en icono y representación del alto grado de inseguridad que vivimos en Venezuela.

El informe también señala que Venezuela está ubicado como el segundo país con la más alta tasa de homicidios del mundo, sólo superado en su magnitud por Honduras.

En Sucre lo que más lamentamos es que a cualquier hora podemos ser víctimas del hampa. Ya aquí, la ley la tienen las bandas de antisociales, quienes deciden lo que vale la vida de nuestros ciudadanos.

Salir y transitar las calles de Cumaná se ha convertido en un deporte de alto riesgo, hemos tenido que desarrollar estrategias y habilidades para no ser víctimas de la delincuencia. Así, muchos estamos pendientes de tener vidrios ahumados en los carros, salir sin objetos de valor a la calle, caminar a paso rápido, cruzar la calle y correr cuando nos vemos amenazados. Todas estas prácticas bajo un constante estado de angustia, pues los ciudadanos no tenemos garantías de seguridad, los sucrenses estamos completamente desamparados y desprotegidos, consecuencia de un modelo fracasado y de la irresponsabilidad de los gobernantes de turno.

Lamentablemente, vemos como nuestros comerciantes son extorsionados a diario por las bandas delictivas que operan y dominan Cumaná, sufrimos un promedio de 6 robos de vehículos diarios, atracos a mano armada en cualquier lugar y a cualquier hora, sicariato, secuestros, hurtos y actualmente vemos como modus operandi irrumpir en viviendas, sometiendo, amordazando y robando a familias enteras, sin que las autoridades pongan un freno a esta escalada de hechos delictivos, que nos mantienen en una constante zozobra y no nos dejan vivir tranquilos.  

El día lunes 9 de febrero en horas de la madrugada ocurrió un intento de robo en uno de los centros comerciales más concurridos de la ciudad ubicado en el centro de Cumaná. Al menos tres muertos, tres heridos y dos detenidos fue la consecuencia de este hecho, efectuado aproximadamente a la 1:00 am, en el que unos ocho delincuentes con armas de fuego y granadas, entraron por el sótano y sometieron a los vigilantes con la intención de robar los comercios del mismo. Así, rompieron los cristales del Supermercado Unicasa con el fin de robar la bóveda del local, momento en el que se activó la alarma, y ocurrió un enfrentamiento, siendo así que los delincuentes lanzaron una granada dentro del citado centro comercial a los efectivos policiales.

Esto debe parar cuanto antes, no es posible que los delincuentes estén mejor armados que los funcionarios policiales, que la industria en Sucre sea el delito y que estos queden impunes, reinando la criminalidad a lo largo y ancho de nuestro estado.

Nos solidarizamos con todas las víctimas de hechos delictivos y lamentamos la grave situación de inseguridad a la que estamos sometidos por ausencia de políticas eficaces en el control de la delincuencia. Exigimos al Gobernador y al Alcalde de turno, que en vez de estar pendientes de las comparsas y los disfraces, se pongan a trabajar, y de una vez por todas solucionen con carácter de urgencia este generalizado estado de pánico bajo el cual vivimos los sucrenses. ¡Queremos vivir tranquilos! ¡Queremos acciones ya contra la delincuencia!