Ysamar Pérez Montilla: El guiso chino


Guanare, 26 de julio de 2014.- En medio del caos económico generado por el paquetazo rojo que nos aplica en cámara lenta el gobierno nacional con las devaluaciones y los aumentos en los precios de los productos de la canasta básica y los servicios básicos, Venezuela recibió la visita del Presidente de China, con quien Maduro firmó nuevos acuerdos para endeudarnos aún más y seguir dándose vida de jeques a costillas del pueblo venezolano, mientras a nosotros se nos va la vida en una cola para comprar cualquier cosa.

En esta visita del Presidente de China se firmaron 38 acuerdos, para un total de 450 en 15 años de “revolución”, y esta vez el dinerito aportado por China es de unos 50 mil millones de dólares, nada más y nada menos, y así nuestro país se ha convertido en el país de Latinoamérica que más financiamiento otorgado por China ha recibido, con contratos que abarcan casi todos los sectores de la vida nacional, desde el petrolero con su faja del Orinoco, el oro, las empresas básicas, la agricultura, obras de infraestructura y vialidad, vivienda, sector eléctrico, telecomunicaciones y satélites, armamento y la importación de electrodomésticos y vehículos.

La peor parte del endeudamiento adquirido con China apenas comienza, ya que los funcionarios chinos exigen medidas y revisan las cuentas del Gobierno, y ¿quién pagará esa deuda adquirida por personajes corruptos e inescrupulosos? las futuras generaciones recibirán esa herencia.

Hoy Venezuela recibe unos recursos de China que serán pagados durante los próximos años con envío de petróleo, hoy estamos enviando unos 500 mil barriles y en los próximos años pasara a ser de un millón de barriles diarios por una pírrica suma, además de que todo los contratos de compras  son a beneficio de las empresas Chinas, incluyendo la mano de obra.          

¿Y que se ha hecho con esta inmensa cantidad de dinero que China ha “prestado” a Venezuela? ¿Ha mejorado la calidad de vida de los venezolanos? La triste realidad es que Maduro y sus enchufados se llenan los bolsillos y la corrupción aumenta, mientras los venezolanos pasan más trabajo cada día para poder sobrevivir.    

China financió el complejo azucarero Ezequiel Zamora y los venezolanos tenemos que hacer cola para comprar azúcar, igualmente para comprar arroz y el gobierno chino financió 15 millones de dólares para producir este rubro. La empresa socialista ganadera “Bravos de Apure” recibió 33 millones de dólares y no hay carne en los frigoríficos. No hay insumos para hospitales, aun cuando China le prestó a Nicolás 630 millones de dólares para compra de material quirúrgico, también se endeudó con China por 5 mil millones de dólares para alimentación y hoy en día hay 60% de escasez de leche, aceite y azúcar. Además, se endeudó por 50 millones de dólares para un sistema de telecomunicaciones entre Venezuela y Cuba, con 109 millones de dólares para compra de radares tridimensionales y con 492 millones de dólares para comprar aviones militares.

Maduro “pidió prestado” 41 mil millones de dólares a China y no sabemos ¿para qué?, también recibió dinero para la Gran Misión Vivienda y nadie sabe dónde están esas viviendas; millones de dólares provenientes del Fondo Chino han quedado en las manos de los enchufados.  PDVSA ha recibido préstamos del gobierno chino como para construir 360 escuelas, pero Nicolás no ha inaugurado ni una; China le prestó 8 mil millones dólares al Ministerio de Energía Eléctrica y todos los días sufrimos apagones durante horas.  En Venezuela hay escasez de cabillas y cemento aun cuando China le ha “prestado” dinero al gobierno para invertir a esas empresas.

La deuda que tenemos con el gobierno chino equivale a dos veces nuestras reservas y por si esto fuera poco, parte del dinero que pidió prestado Nicolás, lo gasta en otros países como Cuba, Bielorrusia y hasta en China.

Con las cuenticas del guiso chino Nicolás, tenemos que, en lugar de conformarnos, seguir trabajando por la recuperación de nuestro país, hablando con quienes todavía creen en este Gobierno corrupto e incapaz, que se llena la boca hablando de soberanía, independencia y anti-imperialismo pero para ellos hay imperialismos "malos" y otros "buenos” sin importarle lo que es verdaderamente fundamental: el progreso y el futuro de Venezuela. ¡No debemos conformarnos!

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