Víctor Pérez: La inflación y la escasez cambiaron nuestros hábitos


Baruta, 06 de junio de 2014.- Gracias a las medidas económicas del “Gobierno Revolucionario”, este socialismo mal entendido, ha parido dos fenómenos que prácticamente muestran  el ADN de países comunistas. Y es que gracias a la inflación y la escasez, hijas insignes de la revolución, nuestros hábitos de consumo han cambiado, eso sin olvidar nuestros hábitos alimenticios que influyen directamente en la salud y desarrollo de nuestra sociedad.

Hace un poco más de una década, los venezolanos teníamos la posibilidad de escoger rubros de diversas marcas, precios o simplemente por curiosidad o moda. Ahora,  nos hemos limitado a un simple acto de fe, y aunque puede ser algo muy religioso, esto es sólo a lo que nos podemos aferrar, a la hora de buscar lo que necesitamos. Más allá de encontrar una camisa o un pantalón, es poder adquirir los productos de la canasta básica  sin que afecte nuestros niveles de nutrición, ya que los pocos artículos que se encuentran carecen de calidad.

¿Y qué decir de los productos de aseo personal? El venezolano siempre ha sido muy preocupado por su imagen y aunque este punto siempre se le busca la vuelta, no se puede andar en un país tropical donde el desodorante brilla por su ausencia. Jabones, colonias y cremas, se han convertido en una especie de lujo y el papel higiénico tiene tanto valor como un kilo de leche. Hemos cambiado, nuestra sociedad la han obligado a cambiar gracias a un sistema que habla de pueblo pero desconoce de él. 

Si consideramos estos aspectos y añadimos el mísero salario del venezolano, estaríamos hablando de un hecho heroico el poder vivir en Venezuela, prácticamente se está sobreviviendo en uno de los países más ricos de América. Mientras tanto,  la inflación sigue creciendo como la espuma, la escasez, sigue desapareciendo productos y el Gobierno sigue creyendo en un proyecto devaluado.

blog comments powered by Disqus