Elías Sayegh: La jungla de King Kong


Caracas, 08 de mayo de 2014.- Vivimos en un país tropical, una jungla, en donde uno sólo se ha logrado imponer sobre los demás. King Kong ha puesto al país de rodillas, ya que es el más grande, el más fuerte. Usa su fuerza bruta cuando ve que otros piensan distinto a él. Cree que el resto de la selva está a su servicio y por eso se comporta como dueño de todo. King Kong no escucha a los otros animales, no los ayuda, ni quiere su bienestar; sólo le interesa mantener su control sobre los otros, mantener el control de los recursos de la jungla para su propio beneficio.

El problema es que King Kong cada vez es más grande y come más, hasta un punto en que una selva tan rica y llena de alimentos ya no le satisface. La vida en la selva se desenvuelve dependiendo del humor de King Kong, lo malo es que casi siempre anda hambriento y amargado. King Kong está acostumbrado a resolverlo todo a base de alaridos, manotones y patadas, puesto que no tiene el más mínimo respeto por las demás criaturas de la selva. King Kong pretende obligar a los demás a trabajar para él, a servirle, bajo amenaza de violencia o destierro, porque cada vez su hambre se hace mayor. Muchos animales ya no ven futuro en las tierras de King Kong y han preferido aventurarse a emigrar.

En poco tiempo King Kong se ha comido parte importante de la jungla; todo lo que ha caído en sus manos, lo que le ha quitado a otros, lo ha devorado sin dejar ni rastro.

Lo peor de todo es que algunos pobres animales de la jungla ayudan a King Kong, pero lo hacen por miedo. Él les recompensa estas ayudas con lo que le sobra de sus banquetes y ellos se conforman por temor. Hoy, todo lo que pasa en la jungla depende de King Kong, y muchos se han acostumbrado a vivir de sus dádivas.

Dentro de King Kong actúan varios órganos, que no pocas veces están en desacuerdo. Su cerebro: centraliza todo el poder, controla hasta su más mínimo pelo, se ha hecho presente en todos sus demás órganos, trata muchas veces de controlar sus impulsos. Su cerebro trata de vender a los demás animales una buena imagen de él. El cerebro sólo está ocupado de mantener su control. Su estómago: muchas veces logra controlar su cerebro. No ha logrado canalizar su hambre y esto hace que devore lo que encuentra. Cuando obedece a su estómago es cuando es más peligroso. Su garganta: sin duda la más potente de la jungla. Casi no se oye otra voz de la fuerza que tiene su garganta. La usa para venderse a sí mismo, para mentir y para ofender a los demás. Su consciencia: ahí deberían converger las distintas corrientes y formas de pensamiento. Ese es el espacio para el debate, para tomar grandes decisiones. Sin embargo, King Kong atrofió su consciencia, permitiendo que sólo una corriente se imponga. Ahora su consciencia está subordinada a su estómago. Sus músculos: King Kong ha desarrollado mucho sus músculos, no para defender sus tierras y a su gente, sino para oprimirlos. A King Kong le encanta exhibir sus músculos, lástima que sólo sirvan para reprimir e intimidar a sus oponentes. Sus manos y pies: son las más grandes de toda la selva, siempre al servicio de su estómago y de su cerebro. Podrían ser utilizadas para construir y desarrollar su comarca, pero sólo destruye y acapara.

La realidad es que hay descontento en la jungla. Todas las demás criaturas están molestas con King Kong, ya que se ha comido y destruido todo. Sin embargo, el miedo todavía paraliza la selva. Nadie que se haya enfrentado a King Kong le ha ganado, pero esta vez King Kong tiene un problema, y es que cada vez necesita más para alimentarse y la jungla no está produciendo suficiente para alimentar a King Kong y a los demás animales. King Kong no muestra compasión con los demás y se afinca para poder saciarse.

La jungla está dividida, unos todavía guardan afecto por King Kong, ya que éste los defendió, pero otros ya no aguantan más y andan buscando la manera de domesticarlo o matarlo, para cambiar de sistema en la selva.

Nuestra jungla se llama Venezuela, un país lleno de recursos e injusticias controlado por King Kong, que no es otro que el todo poderoso Estado "Socialista" o "Kingkoniano".

blog comments powered by Disqus