Caracas, 16 de marzo de 2014.- Existe, sin la menor duda, tortura en Venezuela. La ejerce sin piedad la cúpula de enchufados que gobierna hoy nuestro país.
La tortura diaria que sufrimos los venezolanos tiene diversas formas y distintos niveles de crueldad.
1 Son torturados los cien mil enfermos de cáncer que existen en el país, cuando se les niega radioterapia y quimioterapia oportuna y tienen que esperar largos meses para una crucial operación.
2 Solo 7 de 16 centros de radioterapia funcionan en el país. Solo 1 hospital público (Barrio Adentro III) se ha construido, de los 16 que se prometieron hace 10 años.
3 Sufren tortura los pobres en los barrios, cuando se mantienen cerrados 4 mil 300 módulos de Barrio Adentro, de los 5 mil que se abrieron hace 10 años.
4 Son torturadas las amas de casa cuando tienen que dedicar largas horas de su cotidianeidad para buscar azúcar, harina y café y les marcan los brazos con números, maltratando su dignidad y el derecho que tienen a alimentar a sus familias.
5 Sufren tortura los tachirenses y los zulianos cuando les racionan la gasolina, mientras la cúpula corrupta permite y participa en el contrabando hacia Colombia.
6 Son torturados miles de venezolanos en el interior del país, víctimas de apagones a cada rato, mientras Nicolás y su combo le regalan una planta de 90 millones de dólares a Nicaragua.
7 Millones de venezolanos somos torturados psicológicamente con las 2 horas de cadena nacional llenas de insultos y de odio que nos impone Nicolás diariamente, violando nuestro derecho a oír y escuchar lo que nos dé la gana.
8 50 familias son torturadas diariamente cuando les matan un ser querido y no tienen esperanza de justicia.
Si Gabriela Ramírez tuviera un ápice de dignidad, pondría su cargo a la orden para que la sociedad venezolana, las dos mitades que hoy se enfrentan, se pongan de acuerdo en alguien que los represente a todos, para defender los derechos del pueblo, hoy vulnerados y pisoteados.