Caracas, 28 de febrero de 2014.- Cuanto me hubiese gustado estar en el Salón Ayacucho para poder conversar con Venezuela acerca del proceso de Paz tan necesario en nuestro País, lamentablemente no fui invitado, igualmente le confieso que no creo mucho en sus llamados de Paz repentinos, pero eso no será impedimento para expresarle mis ideas, verdades y algunas propuestas para construir una verdadera Paz.

Comienzo señalando que aún cuando ambos ocupamos cargos de elección popular y que por reglas de protocolo yo debo dirigirme a Ud. como Sr. Presidente y Ud. a mí como Ciudadano Diputado, siento que debo tutearte porque creo que servirá para hablar en confianza y así eliminar cualquier barrera interpersonal distinta al respeto, a la educación y a la sinceridad, los cuales deben estar presente si queremos construir una verdadera Paz, pero soy de los que creo que tutear con respeto ayuda al acercamiento y el acercamiento hoy en día es necesario para construir la Paz, por eso y en esta sola oportunidad me permitiré tutearte manteniendo el respeto de tu investidura.

Me dirijo a ti Nicolás para recordarte que como Presidente eres el primer llamado a liderizar el movimiento por la reconciliación y la Paz, pero una Paz verdadera y perdurable, no una Paz falsa y momentánea; quiero para mis hijos, para mi familia, para los míos y para mi país una Paz verdadera y perdurable, no una Paz que sirva para enfriar la calle y luego todo siga igual, hasta que vuelva a calentarse.

Nicolás, hoy diste una inequívoca señal de que los Venezolanos nos necesitamos, que necesitamos dialogar, que necesitamos conciliar, que necesitamos reconciliarnos, que aunque parezca mentira necesitamos conocernos y reconocernos… Diste una inequívoca señal de que en Venezuela pasa algo y esencia  algo es grave. Tú no invitas a Fedecamaras y a los sectores a los que nos has satanizado por años a conversar por nada; tú los invitas porque algo grave pasa en Venezuela y ése algo es que la violencia tiene tiempo marcándonos la agenda y es allí donde debemos iniciar este diálogo; reconociendo que Venezuela pasa por un pésimo momento violento que nadie quiere vivir, que no somos cuatro loquitos manifestando, ni que todos los que manifestamos somos violentos o lo hacemos con violencia; todos debemos reconocer que hemos fallado, que nos hemos equivocado y que queremos y necesitamos rectificar para acabar con la violencia antes que ella acabe con nosotros; que nos necesitamos unos a otros para salir de este atolladero violento, que este país es de todos y que lo que acá sucede nos duele a todos y cada uno de los venezolanos.

Comenzaste bien y debo reconocerlo, el tono que usaste al comenzar este proyecto de Paz es el de un conciliador, no así el usado por muchos de los que intervinieron; ya veremos si ellos rectifican, o no. Tu tono de voz y discurso estuvieron acordes al objetivo que persigues, yo podría comenzar juzgándolo o tamizándolo, incluso como incrédulo a descalificarlo, pero eso no nos ayudaría a conseguir la Paz y nuestro objetivo hoy según entiendo es construir la Paz, por eso tomaré tu tono conciliador como sincero y de allí parto.

Nicolás, antes de hacerte mis planteamientos recordemos que ambos nos comprometimos al juramentarnos a cumplir y hacer cumplir la Constitución, es decir a respetarla. Partiendo de allí también te aclaro que estas líneas las escribo siendo consecuente con tu llamado a la Paz, el cual tomaré como sincero; y espero así sea ya que de lo contrario está carta sólo servirá para que algunos sepan que existe un Diputado que se llama Fernando Peña y no es eso lo que busco. A mi me conocen los que creo deben conocerme, y más que publicidad busco Paz. Allá los que sobre la violencia que hoy nos agobia han montado un show buscando que los catapulte a la popularidad.

En ese orden de ideas, debemos comenzar teniendo presente dos cosas:
1.    Que las manifestaciones pacíficas son un derecho Constitucional y que como derecho de todo ciudadano debemos no sólo respetar sino apoyar y
2.    Que la presunción de inocencia es otro derecho constitucional que se debe respetar.
En cuanto al primer punto te invito a que caminemos un poco más dentro de él, yo creo que no vale solo con reconocer las manifestaciones como un derecho, sino que además de reconocerlas estamos obligados a escucharlas, mientras no las escuchemos no cesarán. Fíjate, lo que comenzó como un reclamo por la inseguridad y la escasez, por no ser escuchado ha pasado por varios temas hasta el que hoy vivimos que es el que ya no solo protestamos por la inseguridad y la escasez, sino que ahora lo hacemos además por los heridos, los vejados, los violados, los detenidos, los torturados, los reprimidos y porque las muertes de los manifestantes asesinados no queden impunes. Es necesario que escuches Nicolás, tu indiferencia puede seguir causando muertes; no creas que con indiferencia ganarás tiempo, lo que perderemos es vidas Nicolás. Por distintas razones las protestas podrán calmarse momentáneamente, podrán callar por represión, cansancio o desorganización, pero no cesarán y lo que necesitamos es que cesen para que haya Paz. Fíjate que no estoy calificando las distintas peticiones como justas o injustas, valederas o no, por ahora solo te recomiendo que seamos escuchados; eso puede contribuir a construir la Paz, luego nos corresponderá evaluar cuales de esas peticiones, son peticiones justas, válidas y cumplibles, pero por ahora te recomiendo escuchar… Escucha a los que manifestamos porque los venezolanos no consumimos Gas Lacrimógeno por gusto, nos arriesgamos a consumirlo con la esperanza de ser escuchados.

Con respecto al segundo punto Nicolás, deja de estar criminalizando las protestas y a los adversarios, si quieres Paz deja de calificarnos como delincuentes, vagos, violentos, fascistas y cuanto calificativo se te ocurra sin tener una sola prueba, respeta el Derecho Constitucional de presunción de inocencia, ya que mientras haya descalificaciones de parte y parte nunca conseguiremos la Paz.

Partiendo de que juramos respeto a la Constitución y que acabamos de acordar escuchar a los manifestantes y no criminalizar la protesta, como comandante en jefe te propongo en primer lugar girar instrucciones al componente Guardia Nacional para que se mantenga en la calle pero custodiando a la población y a las protestas pacíficas, apoyándolas, protegiéndolas… No reprimiéndolas, una protesta pacífica se escucha, nunca se reprime. Por otra parte en caso de manifestaciones violentas, bien sea las que se desplazan en moto o las que violan derechos y generan violencia las cuales debemos reconocer que existen y es menester rechazarlas, te propongo actuar apegado a las leyes ordenando que las mismas sean disueltas y dispersadas, oye bien mi recomendación y lee bien mis palabras: dije dispersadas, no reprimidas o atacadas. Uno de los hechos que hoy nos ha traído hasta acá es que las protestas, tanto pacíficas o no han sido atacadas, en algunos casos reprimidas brutalmente, reprimidas con saña, con alevosía, eso de buscarlos en estacionamientos, casas, edificios, garajes, eso de perseguirlos durante cuadras y dispararles a quema ropa, eso de apresarlos y torturarlos más que dispersar es atacar y el ataque en sí conlleva un reto y retar a esos manifestantes es tener que fajarte luego con ellos, en conclusión es alejar la Paz. Hazme caso, gira esas instrucciones y seguro estoy que comenzaremos a recobrar la Paz; mientras no lo hagas la protesta seguirá en las calles, la GNB seguirá reprimiendo, las manifestaciones cada vez se tornaran más violentas, las represiones cada vez serán más violentas y el odio cada vez será más grande. Tu imagen de genocida irá en aumento y la Paz seguirá barranco abajo, pero esta vez arrastrando a la vida, a la economía y al país.

Nicolás, la Verdad y la Justicia son necesarias para conseguir y conservar la Paz. Una paz temporal, una tranquilidad carnestolenda disfrazada de Paz no es lo que nos conviene; debemos conseguir o construir la Paz verdadera, la permanente. Ya hablamos de escuchar a los manifestantes, ahora nos corresponde hablar con la Verdad y ser Justos. Durante las últimas dos semanas y como consecuencia de las protestas se han producido una serie de asesinatos, alrededor de 20 venezolanos han fallecido si no me equivoco, y un sin números de atropellos que han causado lesiones y violación de Derechos Humanos, que van desde asesinatos pasando por la desaparición forzada de personas hasta llegar al impedimento al libre tránsito, venezolanos muertos a balazos, sorprendidos por barricadas, con guayas, etc., es decir con violencia! Bueno Nicolás, esas muertes, lesiones, desapariciones y demás derechos violados no pueden quedar impunes, si hay impunidad no habrá Paz, eso te lo aseguro. Yo soy de los que piensa que el problema de violencia e inseguridad en Venezuela tiene una de sus razones en la impunidad que deambula en los Palacios de Justicia y circuitos Judiciales; cuando convoques a una concertación nacional podremos disertar más profundamente sobre el tema y sus aristas, por ahora como lo que queremos es encontrar la Paz, te propongo que conformes una Comisión de la Verdad. Ojo, no una que simule la Verdad, esa dirá su verdad y por ser falsa e injusta molestará a un grupo de personas que indignados alterarán de nuevo la Paz, por lo que insisto para conseguir el objetivo necesitamos una comisión de la verdad que busque la llamada verdad verdadera; solo así podremos ser justos.

Luego de determinar la verdad debemos motorizar la justicia; como abogado se que el poder Judicial escucha tus órdenes, no nos caigamos a coba, muchos lo sabemos. Es más hoy varios de tus colaboradores que hablaron en Miraflores en la conferencia por la Paz así lo dejaron ver, entonces motoriza eso, construye la Paz, haz que se haga Justicia, pide que el poder judicial sancione a los que cometieron delitos, sea del bando que sea, muevan los votos que muevan, ellos violaron la Ley y deben sufrir las consecuencias legales por ello. Ten presente que si se ignora, sanciona o criminaliza a uno solo de los bandos y proteges al otro, o si ignoras los delitos de lesa humanidad que han ocurrido, no tendremos Paz; la indignación se hará presente y las protestas también.

Por último en cuanto a esta carta se refiere, aunque sé que no es el sentir de muchos de los que están de mi lado, soy de los que por ahora NO te pide el Vete Ya; por el contrario se que en este momento el “Vete Ya” más que ayudar a conseguir la Paz la agravaría. No nos caigamos a coba, acordamos ser sinceros y si somos sinceros y leemos las estadísticas electorales el país se encuentra dividido o distribuido en dos partes casi iguales, que como alguien dijo en tu llamado a Conferencia ninguna de esas partes puede imponerse o pretender pegar de la pared a la otra y si alguna de ellas osare tratar de imponerse a la otra no conseguirá otra cosa que alterar la Paz, oye o lee bien NINGUNA, ni la que tu representas, ni la que yo represento. Sabemos que así como de nuestro lado hay quien te pide el “Vete Ya”, de tu lado hay quien te pide el “quédate allí”, “gobierna, échale pichón”, y hasta quien te dice “ignóralos o aplástalos”, “elimínalos”; entre otras cosas, y que cualquiera de las dos altera la Paz, por eso Nicolás yo te propongo el cambiar el “Vete Ya” por el VERTE YA. Te preguntarás que es eso?, tranquilo que no te estoy pidiendo una cita; el “Verte Ya” involucra en que quiero “Verte Ya” cumplir la Constitución, el “Verte Ya” escuchando a los estudiantes que hoy protestan, el “Verte Ya”impartiendo instrucciones para que la GN deje la represión, el “Verte Ya” reconociendo que para sacar el país adelante todos somos necesarios, el “Verte Ya” dar pasos hacia la Paz, el “Verte Ya” respetando a la otra mitad del País, el “Verte Ya” ordenando cumplir la ley desarme, el “Verte Ya” impulsando la producción Nacional, el “Verte Ya” administrando nuestros recursos sin regalarlo a otros países, el “Verte Ya” denunciando y sancionando los excesos de funcionarios, el “Verte Ya” surtiendo los Hospitales, el “Verte Ya” liquidando  divisas a los medios para su funcionamiento, el “Verte Ya” gobernar para todos los Venezolanos sin distingo político, el “Verte Ya” girando instrucciones para que se conformen las comisiones de la Verdad social, política y económica, porque ninguno de esos tres aspectos hoy en día están bien; como te lo dijo Fedecamaras “Venezuela no está bien”, llegamos al punto en que o nos estamos matando entre nosotros, o nos estamos deseando la muerte o estamos celebrando o festejando sobre los cadáveres de los otros y eso no está bien; ya sé que dirás que hubo quien se alegró con la muerte de Chávez, pues que Dios los perdone y juzgue, yo no me alegré y por eso no me lo digas a mí, pero eso sucedió y nos demuestra que Venezuela no está bien. El odio indica que la deuda social no ha sido saldada, que la economía cada vez retrocede más, la inflación nos come día a día y en lo político no solo que no avanzamos y estamos estancados en 50 y 50, sino que acá entre tú y yo, cada vez los políticos estamos quedando peor ante la opinión pública, estamos asumiendo posiciones de defensa y ataque sobre temas políticos y los problemas de la gente los dejamos a un lado, no los resolvemos, no los debatimos, no le buscamos solución, es más mientras estamos los políticos entretenidos defendiendo posiciones políticas, los problemas de la gente están agravándose esperando solución, por eso quiero Verte Ya convocando a un gran encuentro nacional sincero, reconociéndonos unos a otros, sin agredirnos sin criminalizarnos (aprovecho para decirte que la palabrita “Fascista” esta cansona y perdiendo efecto y además como boomerag devolviéndose a los que la endilgan); dejemos los problemas políticos para las elecciones y dediquémonos a atender los problemas del pueblo no político, para eso es que fuimos electos. Si no lo haces no habrá Paz, seguiremos en las calles, tu seguirás reprimiendo y allí si tendremos que auspiciar el Vete Ya!!!

Podría seguir escribiendo varios “Verte Ya” pero creo que lo pautado hoy en Miraflores eran unos 10 minutos y ya los cumplí.

Nicolás, espero puedas leer estas líneas y que las mismas sirvan para que consigamos la Paz Verdadera antes de que la Violencia acabe con nuestros sueños.

Saludos,
Fernando Peña

Diputado a la Asamblea Nacional