Caracas, 03 de diciembre de 2022.- El vicepresidente de estrategia comunicacional y de relaciones internacionales de Primero Justicia (PJ) Julio Borges, conversó este miércoles con el periodista César Miguel Rondón sobre su libro "La Patria que Viene", una obra que recoge su testimonio sobre los últimos años de lucha en Venezuela, los errores cometidos por la dirigencia política y los procesos que se abren a partir de ahora. Borges aseveró que fue un error la ruta planteada por el gobierno interino sobre cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres. Reveló que en el 2019 se construyeron puentes con actores del madurismo que querían salvarse frente al posible colapso del régimen, pero la fuerza que se construyó se desinfló.

“Este libro se hace con varios propósitos. Lo primero es contar que el proceso de presión que se ha logrado durante los últimos años costó mucho tiempo, vidas, exilio y millones de venezolanos fuera del país. Yo quise contar cómo armamos ese proceso de legitimación del parlamento y deslegitimación de Maduro. Yo quise contar qué fue lo que pasó para que ese proceso no llegara a un final feliz. En último lugar, estamos en un momento nuevo, y por eso quise estructurar las lecciones aprendidas del pasado para lo que viene ahora”, destacó.

Borges cuestionó la ruta que se planteó en el momento, la cual a su juicio no se consultó y puso en manos de terceros la posibilidad de un cambio político. “El tema del cese de la usurpación no dependía de los civiles, estaba en manos de los militares o de Estados Unidos. Nosotros creíamos que la bandera de elecciones libres podía crear más presión en ese momento. Si planteábamos esa propuesta, los aliados de Maduro no iban a tener excusas para no apoyarnos. Es tan así, que tres años después seguimos en el mismo tema: exigiendo elecciones libres”, señaló.

Asimismo, Borges reveló que, en el momento de mayor presión, actores del régimen buscaron construir puentes para tratar de encontrar una salida a la crisis política. “En el 2019 hubo un temor psicológico y real por parte de actores del madurismo, que empezaron a contactarnos a nosotros y a gobiernos aliados para salvarse, pero luego ocurrió el proceso del 30 de abril y se dio una película que no estaba planteada y toda esa presión que se venía construyendo se desinfló”, reveló Borges sobre uno de los detalles de su libro.

Recalcó que el manejo de los activos por parte de la oposición desdibujó la labor de los políticos venezolanos y golpeó la confianza en el liderazgo. “Nosotros pensábamos que era un error crear burocracia, manejar empresas y usar recursos públicos. Todo esto llevó a que se dieran actos de corrupción que golpearon la confianza en el liderazgo político. Se burocratizó hacer oposición. Llegó el momento de decir aquí hay que abrir una dinámica diferente, hay que quitar las empresas del manejo de la oposición. Si no se corta eso, terminas creando la inercia que tenemos hoy. La oposición pasó más tiempo discutiendo sobre la gerencia de empresas, que sobre cómo sacar a Maduro del poder”, reflexionó.