Maracaibo; 27 de mayo de 2017.- Salieron a las calles por la libertad de expresión. Los periodistas zulianos en compañía de sociedad civil, estudiantes y movimientos políticos marcharon en defensa de la libertad de expresión; el derecho de informar y ser informados, conmemorando a su vez el cierre de Radio Caracas Televisión, hace 10 años. La concentración se dio lugar en la avenida Delicias con calle Dr. Portillo, para marchar hasta la sede del ministerio del Poder Popular para la Comunicación y la Información (Minci), en el sector Primero de Mayo.

Rafael Ramírez Colina, diputado a la Asamblea Nacional afirmó que en Venezuela se sigue cercenando el derecho a la libertad de expresión. “10 años después del cierre de RCTV, un canal querido por todos los venezolanos, la situación no ha cambiado. Hoy ese legado de Chávez sigue vivo, los medios están amenazados y los acecha un cierre inminente si opinan distinto a la dictadura”.

A su opinión, Nicolás Maduro manipula y amenaza a los medios  de comunicación para que no muestren la realidad de un país en crisis. “La dictadura ha impuesto su verdad como la única y someten a los medios a una autocensura jamás vista en Venezuela. La libertad de expresión es un termómetro para medir la democracia y ya los periodistas no pueden contar historias, ya la gente no sabe lo que pasa en su país, ni tiene los medios para denunciar”. 

Manifestó su solidaridad a los periodistas venezolanos que han sido censurados y maltratados en medio de las manifestaciones de los últimos 57 días en todo el país. “Estos periodistas padecen las mismas necesidades de todos en medio de un país en crisis, arriesgan sus vidas en las manifestaciones, la dictadura y sus colectivos los agreden porque no quieren que el mundo se entere de la verdad venezolana. Ellos día a día luchan por mantenerse vigente en contra de una dictadura que les roba el papel, les cierran emisoras, les quitan concesiones. Estamos convencidos que Venezuela merece ser un país libre en pensamiento, en expresión, para que cada quien pueda decir lo que quiera sin ser castigado por la dictadura o ser censurado por un medio que se ha visto obligado a callar”.