Maracaibo, 26 de febrero de 2015.- Vestidas de negro “por dentro y por fuera”, las madres justicieras protestaron hoy. Se instalaron en la esquina de la Defensoría del Pueblo, seccional Zulia, ubicada en el casco central de Maracaibo y entregaron un documento a esa institución exigiendo la derogación de la resolución 008610 emitida por el Ministerio de la Defensa el pasado 27 de enero.

Cecilia Leonardi, miembro de la directiva regional de Primero Justicia Zulia, manifestó que la resolución viola el artículo 68 de la constitución y desvirtúa el comportamiento de la Fuerza Armada Bolivariana frente a una protesta pacífica. “Las madres venezolanas alertamos lo que podía suceder con esta resolución y los resultados son cinco jóvenes muertos por manifestar en manos de funcionarios de seguridad. El caso especifico de Kluivert Roa, en Táchira, sucedió porque el funcionario fue juez y verdugo al mismo tiempo. El oficial estaba autorizado para dictar inmediata sentencia de muerte”.

Señaló que ambos jóvenes involucrados en el hecho son víctimas del Gobierno. “El que resultó muerto es víctima del Gobierno que arremete contra los que piensan distintos y el que se convirtió en asesino por cumplir una resolución que va en contra de la Constitución. Por eso estamos convencidos de que aquí es mucho más culpable el Gobierno, que fue el que dio la orden, que el oficial que disparó y la ejecutó. Exigimos que la Defensoría del Pueblo interceda ante este hecho y solicite la derogación de esta resolución”.

Destacó que las madres venezolanas no pueden estar tranquilas con estos hechos. “Nosotras estamos de luto. Nos duele saber que por lo menos 16 mil jóvenes son asesinados cada año en este país y que por lo menos un millón se han ido para buscar futuro en otros lugares. Nosotros los hemos parido, criado y educado para poder disfrutar de ellos y este Gobierno los obliga a irse de su tierra o los matan sin ninguna vergüenza. Nuestros jóvenes, el futuro del país, se van o los asesinan”.

Leonardi exhortó a los jóvenes a no caer en el juego de la violencia que propicia el Gobierno y los instó a la organización electoral que, a su juicio, es el primer paso para el cambio de Venezuela.