San Francisco, 23 de septiembre de 2014.- “Cada rincón de Venezuela puede ser un espacio para la discusión de las ideas, para el acuerdo entre sectores y el reconocimiento de los problemas que nos perjudican a todos. El municipio San Francisco del estado Zulia no escapa de la crisis económica, del desabastecimiento, la inflación, la inseguridad y la falla de los servicios públicos”.

Juan Pablo Guanipa, coordinador de Primero Justicia (PJ) Zulia, aseguró que el municipio sureño no es un territorio en donde no aplique la Constitución Nacional, que establece en su artículo 68 el pleno derecho a la protesta pacífica. “Todos los venezolanos tenemos razones para protestar y nosotros lo hacemos por los problemas que nos afectan a todos por igual. En San Francisco se han dado a la tarea de amedrentar a la gente, incluso a nuestros dirigentes para que no manifiesten su descontento, pero nosotros no nos detenemos. Estamos en la calle para devolverle la esperanza a la gente”.

Guanipa, quien acompañó a los dirigentes de San Francisco en una toma de esquina en la calle 171 con la carretera vía la Cañada, explicó que con estas actividades se busca recordarle a la gente que la situación del país puede cambiar, que existen los mecanismos democráticos para hacerlo y que Primero Justicia trabaja en ello.

Ildani Sierra, coordinadora juvenil de PJ en San Francisco, aseguró que el papel del joven es primordial en el esfuerzo por devolverle las libertades al municipio. “Los jóvenes tenemos el tiempo y las fuerzas para estar en las calles sumando cada vez más personas que sienten que pueden estar mejor. Queremos despertar las esperanzas de aquellos que están dormidos en este municipio, porque aquí lo que sobran son problemas y nos faltan libertades”.

Destacó que la gente se ha acostumbrado a callar por miedo a perder un empleo, un beneficio de la Alcaldía, o por miedo a que los ataquen. “Desde abril del año pasado en San Francisco no se puede protestar porque bandas armadas salen en sus motos a meterle miedo a la gente. Muchos hemos sido correteados, amenazados y hasta golpeados porque no existe tolerancia frente a nuestra manera de pensar. Eso tiene que cambiar porque estamos en nuestro derecho de manifestar nuestro descontento. Por eso es que estamos en las calles para que la gente vea que sí es posible el cambio y que los apoyamos en desear un país mejor, con calidad de vida y la libertad que nos da ser venezolanos”.  

El caso

Primero Justicia toma las calles de San Francisco como una reacción, sana y democrática ante las amenazas y golpes que recibieran sus jóvenes dirigentes hace un mes.

Luis Araujo miembro de la dirigencia juvenil de PJ, fue privado de libertad el pasado viernes 30 de agosto por parte de Polisur, mientras ejercía su derecho a la protesta junto a sus compañeros de lucha, en la esquina de la calle 171 con la carretera vía la Cañada del municipio sureño. Araujo fue liberado tras dos días arresto en el que fue sometido a juicio por el presunto delito de daño a la propiedad privada con violencia, todo esto sin que fuese presentada ninguna prueba. Se encuentra actualmente bajo régimen de presentación una vez al mes ante el tribunal.