Los Teques, 16 de junio de 2014.- Ya hace más de un año que el presidente de CorpoMiranda, Elías Jaua, anunció que en los Altos Mirandinos se llevarían a cabo varios proyectos de infraestructura para beneficiar a la colectividad, entre las obras destacan la ampliación o prolongación de la avenida Víctor Baptista para convertirla en una perimetral, la  construcción de un estacionamiento en lo que será la estación del Metro Los Cerritos y la Construcción de un Gran Abasto Bicentenario en El Tambor.

Para los habitantes de Los Teques la ejecución de estos proyectos forma parten de una larga lista de promesas que ha hecho el Gobierno Nacional y que no han  cumplido. Ante esto los residentes de la capital del estado expresaron su pesar. Entre ellos Oscar González, quien tiene 75 años de edad y vive en El Trigo. “Ninguna de estas promesas anunciadas ha sido cumplida. Es siempre una burla para el pueblo. Estamos cansado de palabras al aire”.

Sostuvo también que el municipio Guaicaipuro está lleno de problemas por la falta de funcionamiento de los servicios públicos. “Aquí no contamos con una figura del Gobierno nacional que nos represente y que resuelva los problemas que tenemos. El alcalde que tenemos que no le hemos visto la cara, estamos ando recompensa a quien logre localizarlo”.

Por su parte, Santa Subero quien es habitante del sector El Nacional, también expresó su descontento por la cantidad de promesas incumplidas por parte del Gobierno central en Los Teques. Dijo que lamentablemente quien termina pagando los platos rotos siempre es el pueblo.

“Tengo entendido que estas obras ya habían sido planificadas para realizarlas y no veo hechos a esta fecha. Ni siquiera una piedra han puesto en esos lugares. Este Gobierno promete y promete y no cumple nada, ya estoy cansada de escuchar promesas y no ver resultados, yo sólo le pido al señor Elías Jaua que por lo menos cumpla una de las promesas que le ha  hecho al pueblo”.

 Para ella Venezuela atraviesa uno de los peores momentos de su historia como país. Dijo que se ha mantiene firme en su fe, creyendo firmemente que este escenario cambiará, “La situación crítica que estamos viviendo no la vamos a superar, ni vamos a cambiar el rumbo del país  sino buscamos de Dios, porque sólo él es quien nos puede ayudar a que seamos mejores personas con valores que es de lo que más carecemos hoy en día y es por ello que vemos tanta corrupción que termina afectando siempre a los más necesitados”.