Mérida, 25 de abril de 2014.- Como una violación a los derechos fundamentales de los ciudadanos, catalogó el alcalde Carlos García la decisión de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de ilegalizar las protestas en Venezuela.

García aseguró que mientras el Gobierno nacional continúe haciendo uso de las instituciones del Estado para su conveniencia, se incrementará aún más el descontento del pueblo; no sólo ante las deficiencias en los servicios, sino ante la ya “insostenible” crisis social.

"Esta lectura que ha hecho el TSJ sobre el artículo 68 de la Constitución Nacional, que establece que los ciudadanos y ciudadanas tienen derecho a manifestar pacíficamente, y que ahora aseguran que no es un derecho absoluto, sólo incrementará la violencia, la represión y el autoritarismo en Venezuela”, afirmó.

Asimismo, el Alcalde del municipio Libertador tildó de “gigantesco error” el que, a su juicio, emprendió el gobierno para cercenar los espacios que corresponden por ley a los ciudadanos.

De igual forma, el burgomaestre Carlos García se pronunció ante la militarización de la ciudad de Mérida, expresando que ha sido exagerada la cantidad de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que han sido desplegados. Agregó que los merideños se preguntan, ¿Qué sucedería si se utilizaran dichas fuerzas para combatir la delincuencia que reina en el país?, que según cifras oficiales han convertido a Venezuela en uno de los más violento del mundo.