Caracas, 03 de octubre de 2013.- Este jueves la Alcaldía del municipio Sucre realizó un evento llamado “Jornadas de Gobernabilidad”, en el cual el alcalde Carlos Ocariz, presentó su modelo de gestión “pública, participativa y de inclusión”.

El candidato por la Mesa de la Unidad explicó que los problemas municipales no deben verse como uno grande sino dividirlo en muchos pequeños. “Cuando se entiende esto, es más fácil buscar una solución. Yo me prometí nunca pisar este edificio (Centro Prestigio Giorgio) hasta que fuese alcalde para no contaminarme con la politiquería.”

Informó que diariamente en el municipio Sucre se producen cerca de mil doscientas toneladas de basura. Además, Ocariz comentó que al momento de iniciar su gestión se percató de que este sería uno de sus retos más grandes. En ese momento los camiones recolectores fueron retirados. Él se arriesgó a buscar un grupo de empresas contratistas con camiones de volteo. Aunque no tenía dinero les pidió confianza y así dio inicio a un nuevo plan de recolección.

“Yo no perdí tiempo intentando cambiar la mentalidad de las personas. El tiempo hubiese pasado y la comunidad nos hubiese cobrado. El objetivo es que la gente perciba que tiene algo distinto, se debe innovar.”, aseguró.

Para Ocariz los primeros cien días de gestión son claves. Si una persona intenta cambiar la mentalidad de la gente pierde su tiempo. Es por esto que su gestión “hace ruido con pequeñas iniciativas”, entre ellas, el concierto de la Sinfónica que se realizó en la redoma de Petare.

Rechazó las gestiones tradicionales que exige de la población una carta para sus gobernantes, que se les rinda pleitesía a cambio de cumplir con las necesidades.

Sucre representa aproximadamente el 40% de la votación del estado Miranda. “El reto es transformar el municipio y que la gente sienta el cambio, no hacer lo mismo un poquito mejor. Un alcalde nunca debe perder su creatividad”, reflexionó.

Como filosofía de gestión pública enfatizó en que se debe entregar el poder a la gente para demostrar confianza. Es decir, que sea la misma gente que maneje los fondos para atender sus necesidades.

“El presupuesto participativo transforma la mentalidad de las comunidades. Hay que creer en la gente. Todo cambia cuando crees en ella”, expresó.

Ocariz aseveró que su slogan “Una obra cada 8 horas”, está basado en una realidad, pues asegura que la alcaldía de Sucre trabaja con la gente, y cuando los fondos son manejados por la comunidad rinden hasta cinco veces más que cuando son manejados por el estado.