Caracas 02 de junio de 2014.- Para Tomás Guanipa, secretario general nacional de Primero Justicia y diputado a la Asamblea Nacional, el relanzamiento de las Misiones por parte del gobierno de Nicolás Maduro demuestra el colapso total  del sistema social en el país y la ineficiencia de este gobierno.

En este sentido Guanipa recordó la propuesta de la tolda amarilla  para discutir y aprobar la Ley de Misiones en el mes de abril del año 2012  por considerar que las Misiones impulsadas en ese entonces por el gobierno nacional no estaban dando resultados favorables.

“Dijimos hace dos años que queríamos llevar esa Ley de Misiones para institucionalizar los programas sociales en el país y  que no formaran parte de un tema clientelar del gobierno de turno, sino que fuera un derecho de todos los venezolanos”.

El parlamentario recordó que el objetivo de esta propuesta era poder descentralizar las Misiones y hacerlas más eficientes y efectivas para la gente. 

“Recordemos que  en abril del año 2012 Primero Justicia anunció el inicio de la recolección de firmas para introducir por iniciativa popular la Ley de Misiones en la AN, hace exactamente 2 años, 16 de mayo del año 2012, en esa fecha Primero Justicia y la Unidad consignaron 200 mil firmas que avalaron el proyecto de Ley de Misiones en la AN y solicitaron su inmediata discusión y aprobación con el propósito de darle un contenido a los programas sociales en Venezuela”.

El parlamentario destacó que “un año después del gobierno de Nicolás Maduro anuncian y reconocen que las Misiones están muy mal en Venezuela, y hablan del mes de relanzamiento de las Misiones, que no es otra cosa que la fusión de Misiones porque ya no tienen la capacidad para poder resolver ningún tipo de problema a los venezolanos”.

Aseguró que el gobierno no posee la capacidad de sacar a flote los programas sociales en el país, “porque los dólares ya no le alcanzan, debido a la ineficiencia y la corrupción que representan la marca de este gobierno”.

Para Guanipa el gobierno de Nicolás Maduro está divorciado de los problemas de la gente “es evidente el rechazo del gobierno a la necesidad de todo un pueblo de poder vivir mejor”.