Caracas, 23 de enero de 2016.- Una vez revisado y analizado el Decreto de Emergencia Económica N° 2.184, rechazado por el Parlamento venezolano, el diputado a la Asamblea Nacional por Primero Justicia Carlos Paparoni, aseguró que no se aprobó porque sería equivalente a seguir cavando cuando lo que se quiere es salir del foso.
Paparoni explicó que "el Decreto también implica una peligrosa declaración de un Estado de Excepción que restringe innecesariamente las garantías constitucionales de los venezolanos en un momento en el que se requiere más certidumbre. Entre 2003 y 2012, años de bonanza, las decisiones del Ejecutivo agravaron la fragilidad de la economía venezolana y ahora piden un cheque en blanco que aumenta las oportunidades para el despilfarro, la desviación y la corrupción y la apropiación indebida de bienes privados sin control alguno. Adicionalmente, el Decreto no protege el gasto social, reafirma la opacidad fiscal, no asegura la estabilidad monetaria y puede servir para atacar algunas empresas privadas y para privilegiar a otras, elementos que se agregan a las otras razones por las que se debe rechazar el decreto. También hay que decir que El Ejecutivo Nacional no necesita de un Decreto de Emergencia Económica para realizar las mayorías de las acciones que propone en el Decreto. ¿Por qué restringir las garantías constitucionales si no es necesario para que el Ejecutivo tome medidas económicas?".
Ante ello, el parlamentario por la tolda aurinegra, indicó que "es nuestro deber plantear propuestas para el manejo de la crisis en el corto plazo. Creemos que es necesario remover con urgencia los obstáculos a la producción nacional, lo que implica una serie de medidas que garanticen el acceso a las materias primas e insumos nacionales e internacionales. Debe maximizarse la eficiencia y el alcance de programas sociales que atiendan a los sectores vulnerables. Debe crearse un entorno favorable a la inversión privada para lo cual deben revisarse las políticas que hoy en día la asfixian. Igual creemos que en materia de salud y de alimentos, deben tomarse medidas urgentes y concretas para atender a los grupos vulnerables".
En el mismo orden de ideas, propone que "la creación de dos Fondos de Urgencia para atender ambos sectores durante los próximos sesenta días. Debe publicarse el presupuesto de divisas de 2016 y priorizar claramente los sectores productivos, lo que implica atender la deuda del Gobierno con los proveedores internacionales. La situación de la producción y productividad de las empresas estatales debe ser revisada con urgencia y deben tomarse decisiones que permitan poner a producir a esas empresas a su máxima capacidad. Debe suspenderse la venta con petróleo a descuento".
Por ultimo, el diputado de Primero Justicia Carlos Alberto Paparoni, cree qie no se puede resolver un problema sin que se atiendan las causas. "Estamos abiertos al diálogo sincero y constructivo con el Ejecutivo Nacional y todos los sectores nacionales para ayudar a solucionar los problemas urgentes del país".