Caracas, 08 de septiembre de 2016.- En Gaceta Oficial n° 40.977 vemos como el “pueblo empoderado” designa a militares de “alto rango” para la supervisión del “ciclo producción-distribución” de rubros escasos, o lo que es lo mismo, rubros controlados. De esta manera Venezuela tiene su  Gral. Azúcar, su Gral. Caraota y su “Gral. Papel Toilet, Toallas sanitarias y Pañales desechables”, los cuales  tienen como misión garantizar el abastecimiento “pleno del pueblo”.

Lo primero que llama la atención es que el “pueblo” entregue la producción y distribución de bienes básicos a aquellos que acusa y percibe como los causantes de la escasez y las colas; a aquellos que han manejado más de 1.500.000.000.000$ para importación de alimentos; a aquellos que compran productos importados con sobreprecio; a aquellos mismos que invadieron haciendas, robaron el ganado y destruyeron la producción; a aquellos que controlan lo puertos, desvían productos al mercado negro y alimentan el contrabando de extracción.

De esta manera  tenemos una versión aún más ridícula del mismo modelo fracasado  de controles, con su militarización de la producción y distribución, y criminalización de la actividad económica; profundizando el craso error de pretender planificar la economía y sus procesos desde un escritorio, con órdenes centralizadas y ciegas, sin comprender los mecanismos que subyacen en el accionar humano libre, basado en el respeto a la propiedad privada y la subjetividad humana.  Vale recordar que toda hambruna que ha vivido nuestro mundo en pasado cercano ha sido consecuencia de modelos colectivistas como USRR, Ucrania, China, donde se desprecia y se interviene el accionar libre del agente, consumidor, productor, sustituyéndolo por un corrupto y pesado mecanismo burocrático y militar, donde no hay espacio para libertad y la propiedad de los bienes de producción.

De esta manera, lo que propone Maduro como solución para la crisis, es más hambre para un pueblo sumido en la “miseria” y el “hambre”.  Maduro se empeña en la profundización del modelo socialista, con la respectiva crisis humanitaria que lleva aparejada. Maduro y sus asesores, con Serrano Mantilla de Podemos a la cabeza, no tienen intención de corregir o abandonar el modelo, sino de inmolarse en el mismo, inmolando a todos los venezolanos, chavistas o no, que vivimos en Venezuela. La única explicación para que los militares lo acompañen en esta suicida misión, es que la Misión “Abastecimiento Soberano” encuentran los incentivos adecuados para salvar su propio pellejo, al menos en el corto plazo, y ser así parte de la “élite corrupta” que nos gobierna.

Es así como los venezolanos que sufrimos las “miserias del socialismo”, solo tendremos un cambio económico, si logramos un cambio político.  Pero para  ese cambio político se necesita la presión de calle que vimos el 1S, la de un pueblo que despertó “masivamente y en paz” como nunca en nuestra historia. Solo con ese pueblo movilizado en paz, el Gnal Papel Toilet, tendrá la opción que de presionar en las más altas esferas, el cumplimiento “exacto” de la Constitución.