Caracas, 24 de febrero de 2015.- El Gobierno se quedó sin soluciones y solo apuesta a la persecución de quienes promueven la necesidad de un cambio. Esta actitud agravará la realidad económica del país y le abre la puerta a una crisis institucional en la que no podemos caer.

Ante las dimensiones del problema económico y el descontento popular, la apuesta del Gobierno es llevar al país al camino de la violencia; por eso la detención del alcalde metropolitano Antonio Ledezma, las amenazas contra nuestro coordinador nacional Julio Borges, pero la respuesta de la oposición debe ser unirse y agruparse en torno a una victoria contundente en  las elecciones a la Asamblea Nacional.

Con el camino de la violencia y la deriva autoritaria se pretende ocultar la megadevaluación que acaban de meterle al país; la subida de precios de alimentos como el azúcar, la harina, la carne o el pollo y la altísima inflación que empobrece todos los días a los venezolanos. 2014 tuvimos un índice inflacionario de 68,5%, siendo el más elevado del planeta.

El descontento que refleja encuestadoras como Datanálisis tiene al Gobierno muy nervioso y errático, por lo que han apostado a la agenda radical para tratar de unificar sus filas; sin embargo la población no está comprando esa estrategia, pues solo espera respuestas a sus necesidades. Lamentablemente cada vez arrecia más la escasez de productos de primera necesidad; y el desabastecimiento de medicamentos es de casi 70% en el país, sin que haya soluciones previstas por quienes hoy están en el poder.

Hace unos días el gobernador Henrique Capriles decía, con mucho acierto, que el oficialismo es el único que está necesitando un atajo que les permita oxigenarse y mantenerse. Por eso el rumbo arbitrario e inconstitucional que adelanta el Gobierno no amedrenta a luchadores demócratas como Borges, Ledezma y el resto de la dirigencia de la Unidad; al contrario, la reacción que estas medidas ilegales generan, es la indignación y el fortalecimiento de todos los que queremos un cambio. No permitiremos que la deriva autoritaria nos desvíe del camino para lograr un país de libertad y progreso para todos.